· ¿Puede una máquina mejorar el funcionamiento de la mente?
¿Puede aumentar la inteligencia? ¿Puede mejorar la capacidad de aprender,
pensar, recordar, crear?
Así como existen aparatos para estimular el desarrollo
armónico del cuerpo y para mejorar el desarrollo muscular también hay aparatos
que estimulan nuestro cerebro, en formas específicas y según la necesidad y
tiene acción sobre la secreción de hormonas y neurotransmisores.
En los 60 años se demostró que utilizando la
bio-retroalimentación podemos aprender rápidamente a alterar sistemas
involuntarios como la presión sanguínea, secreción de hormonas, etc. Esto se
realiza a través de máquinas sensibles que perciben la actividad eléctrica del
cerebro.
Los avances tecnológicos de los últimos años facilitan
logros aun más trascendentes.
Las funciones de estos aparatos también permiten un
excelente estado de relajación en el cual aparece la sincronía y estabilización
del ritmo cardíaco, respiración y pulso. Tienen estímulos visuales, audibles y
táctiles, que llegan a los dos hemisferios cerebrales permitiendo sincronizar
el funcionamiento de ambos y hacer uso de un porcentaje ostensiblemente mayor
de la capacidad de inteligencia de nuestro cerebro comparativamente con el uso
habitual que no supera el 10% de la misma. Con esto se puede conseguir mayor
capacidad creativa, mejorar la memoria y el aprendizaje, disminuir el estrés y
las fobias, aumentar nuestro sistema inmunitario, superar insomnio, adicciones,
realizar visualización creativa con optimización de resultados terapéuticos,
etc.
La máquina no reemplaza lo que debe hacer el hombre, pero
puede ser, bien usada, una gran ayuda para su progreso físico y mental.
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